Coyuntura Laboral: Principales Indicadores #1 Julio 2022

Coyuntura Laboral: Principales Indicadores #1 Julio 2022

Informe elaborado por Federico Vocos (OCT – CITRA/CONICET)

Introducción
En un contexto sumamente complejo como el que nos encontramos, desde el Observatorio de Condiciones de Trabajo del Centro de Innovación de los trabajadores (OCT-CITRA), consideramos relevante presentar de forma periódica una síntesis de los principales indicadores laborales según fuentes disponibles, con el propósito de poner a disposición, un cuadro de situación actualizado sobre las principales variables del mundo del trabajo.
Es importante analizar la siguiente información en un contexto marcado por dos procesos económicos que tienen una fuerte incidencia:
I. Un sostenido nivel de crecimiento del producto interno bruto (PIB). En el primer trimestre de 2022, el PIB creció 0,9% en términos desestacionalizados respecto al cuarto trimestre del año anterior. En comparación con igual período del año anterior, registró un aumento de 6,0% en el primer trimestre del año.
II. Un elevado nivel inflacionario. El nivel general del Índice de precios al consumidor (IPC) aumentó 5,3% mensual en junio de 2022, y acumuló, en los primeros seis meses del año, una variación de 36,2%. En la comparación interanual registró un incremento de 64,0%.
Los indicadores que se presentan a continuación son los más recientesque se encuentran disponibles por los distintos sistemas de información gubernamentales.

Coyuntura Laboral: Principales Indicadores. Febrero 2023

Coyuntura Laboral: Principales Indicadores Febrero 2023 # 3

Informe elaborado por Federico Vocos

Observatorio de Condiciones de Trabajo (OCT – CITRA / CONICET). 

Introducción

Presentamos a continuación una síntesis de los principales indicadores laborales según distintas fuentes de información, con el propósito de poner a disposición, un panorama actualizado sobre las variables centrales vinculadas al mundo del trabajo. 

En este sentido, es relevante analizar la información disponible a partir de un contexto marcado por dos procesos económicos que tienen una fuerte incidencia:  

  1. Un elevado nivel inflacionario. El nivel general del Índice de precios al consumidor (IPC) aumentó 6,0% mensual en enero de 2022, y acumuló un incremento de 98,8% en los últimos doce meses. Esta situación se agrava si contemplamos que la Canasta básica alimentaria (CBA) tuvo una variación interanual para el 2022 del 103,8% y la Canasta básica total (CBT) del 100,3%
  2. Una economía cuyo crecimiento se está desacelerando. En noviembre de 2022 se observa una disminución de los niveles de crecimiento respecto al mismo mes del año anterior (2,6%), y el indicador desestacionalizado registra una merma de -0,7%, con lo cual la actividad disminuyó por tercer mes consecutivo. El estimador de actividad económica señala que de enero a noviembre de 2022 la economía acumula un crecimiento del 5,9%

Las temáticas que aborda el presente informe son: Empleo, desocupación y subocupaciónInserción ocupacional y sector; Empleo por rama de actividad y Salarios. 

La paridad de género y la necesidad de crear un sistema integral de políticas de cuidados en la Argentina

Pulso Laboral N°1 Octubre 2022 ISSN en trámite

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La paridad de género y la necesidad de crear un sistema integral de políticas de cuidados en la Argentina

Juliana Boli de Lebron 1

Las deficiencias de la legislación actual

A pesar de que las cuestiones de género han tomado un lugar relevante en la agenda pública, aún persiste una desigual distribución y valoración de las tareas de producción (remuneradas) y las tareas de cuidado (no remuneradas), lo cual constituye una de las principales fuentes de inequidad entre hombres y mujeres. 

Las tareas de cuidados demandan una gran cantidad de horas a quienes las realizan, a la vez que resultan una condición indispensable para la reproducción de la vida y el desarrollo de las sociedades. Sin embargo, tradicionalmente han quedado invisibilizadas y han sido asumidas como actividades propias del género femenino. En Argentina, las mujeres ocupan, en promedio, el doble del tiempo para actividades de trabajo no remunerado que los varones: 6,4 versus 3,4 horas diarias (INDEC, 2014). 

La disyuntiva de la conciliación entre el ámbito doméstico y el productivo explica, en parte importante, la sobrerrepresentación de las mujeres en situación de desempleo y con empleos precarios, vulnerables y con bajas remuneraciones. La precariedad e informalidad se convierten en mecanismos de conciliación para muchas mujeres que desean o necesitan trabajar, pero no pueden dejar de realizar las tareas del hogar y de cuidado. 

En Argentina la licencia por maternidad para el empleo asalariado privado se encuentra regulada por la Ley 20.744 de Contrato de Trabajo (LCT). La misma otorga una licencia por maternidad de 90 días, período durante el cual existe prohibición de trabajar. Este plazo comprende 45 días anteriores al parto y 45 días posteriores al mismo. La trabajadora puede optar por que se le reduzca la licencia anterior al parto, que no podrá ser inferior a 30 días; el resto del período total de licencia se acumula al período posterior al parto. Cabe destacar que durante la licencia las trabajadoras no perciben remuneraciones, sino asignaciones del sistema de seguridad social, garantizando la percepción de una suma igual a la retribución bruta que la trabajadora hubiera debido percibir en su empleo. También la LCT establece la posibilidad para las mujeres de solicitar un plazo de excedencia sin goce de haberes por un periodo mínimo de 3 y máximo de 6 meses. Por otra parte, en relación a los asalariados padres, se regula una licencia especial por nacimiento de hijo/a de sólo dos días corridos, a cargo de la parte empleadora. 

Resulta evidente, que el régimen de licencias por nacimiento y por maternidad establecido en la LCT es completamente insuficiente para promover una distribución igualitaria de las tareas vinculadas con la crianza hacia el interior del hogar. Tampoco contempla licencias para las personas adoptantes, lo cual implica no sólo una falta de reconocimiento a estas familias sino también a familias con otras conformaciones, como matrimonios igualitarios u hogares monoparentales, entre otros.

Por su parte, la Ley 24.716 determina una licencia especial para trabajadoras asalariadas madres de niñas/os con Síndrome de Down, de seis meses adicionales a la licencia por maternidad a cargo de la seguridad social. Sin embargo, no contempla el otorgamiento de una licencia similar en los supuestos de hijos/as con otros problemas de salud.

 

Además de la protección referida en la LCT, existen otros regímenes laborales que cuentan con una protección diferencial que alcanzan a las personas trabajadoras asalariadas del sector público, a las comprendidas en el régimen de Trabajo Agrario y a las comprendidas en el Régimen Especial de Contrato de Trabajo para personal de Casas Particulares, sector este último altamente feminizado.

Las personas comprendidas en el régimen de trabajadores independientes (a pesar de la ampliación en la cobertura de asignaciones familiares para las categorías más bajas del monotributo), hasta el momento no cuentan con derecho a las licencias parentales como tampoco a la percepción de la correspondiente asignación familiar. 

A efectos de morigerar las desigualdades en el sistema previsional, en julio de 2021, a través del Decreto 475, por primera vez se incorpora al Sistema Integral Previsional Argentino (SIPA) el reconocimiento de las tareas de cuidado para mujeres y personas gestantes. Hasta la vigencia del citado decreto los períodos de licencia por maternidad no eran considerados como tiempo de servicio. Esta norma estableció que tanto el plazo de licencia por maternidad como el periodo de excedencia sean computados como tiempo de servicio a los fines de acceder a las prestaciones previsionales. El decreto introdujo también el reconocimiento de un año de servicio para mujeres y/o personas gestantes por cada hijo o hija nacido con vida. A su vez, estableció un reconocimiento mayor para las adoptantes, para quienes tienen hijos con alguna discapacidad y para quienes durante un periodo determinado hubieren percibido la Asignación Universal por Hijo. 

El proyecto Cuidar en Igualdad

En ocasión de la conmemoración del Día del Trabajador/Trabajadora de 2022 el Poder Ejecutivo nacional presentó en el Congreso el proyecto de ley Cuidar en Igualdad en el cual se unifican los proyectos de Licencias Igualitarias y del Sistema Integral de Políticas de Cuidados que se venían trabajando en diferentes áreas del Ejecutivo. Por medio del mismo se promueve la creación del Sistema Integral de Políticas de Cuidados de Argentina y, se abordan las limitaciones normativas señaladas que dificultan la corresponsabilidad parental mediante la ampliación de las licencias parentales existentes y la creación de nuevas licencias que procuran comprender a las diferentes conformaciones familiares. 

En relación al capítulo referido a las Licencias Igualitarias, el proyecto propone la ampliación del período de licencia establecido en la LCT para las mujeres y personas gestantes de 90 a 126 días y la ampliación progresiva de los períodos de licencia para los padres y personas no gestantes de dos a 90 días. Asimismo, contempla la ampliación de las licencias en casos de nacimiento de hijos/as con enfermedad crónica, discapacidad y discapacidad sobreviniente, prematuro y parto múltiple. También crea la licencia parental por adopción. Otra modificación relevante la constituye la extensión del derecho al período de excedencia para las personas no gestantes y adoptantes, como así también, el reconocimiento como tiempo de servicio efectivo del periodo señalado a los efectos de acceder a una prestación previsional. 

En el caso de los trabajadores y trabajadoras en relación de dependencia, durante los períodos de goce de las licencias parentales las personas gestantes, no gestantes y adoptantes perciben una asignación familiar equivalente a las remuneraciones imponibles netas, asegurando de este modo también la cobertura de salud y la que brinda el sistema previsional (vejez, invalidez y fallecimiento), en todos los casos. 

Por otra parte, se crea la asignación parental para trabajadores/as monotributistas, monotributistas sociales y autónomos, sean estos gestantes, no gestantes o adoptantes y cuyo monto resulta equivalente a un Salario Mínimo, Vital y Móvil (SMVM). También en estos casos se extienden los plazos en caso de nacimiento de hijo con enfermedad crónica, discapacidad y discapacidad sobreviniente, prematuro y parto múltiple por el mismo término que se establece para la LCT.

Se establece además una garantía mínima equivalente al SMVM para la asignación correspondiente a las/os Trabajadores comprendidos en el Régimen Especial de Casas Particulares, sean estos gestantes, no gestantes o adoptantes. 

En relación a las personas comprendidas en el Régimen de Trabajadores Agrarios se amplía la cobertura para el personal temporario y se modifica la licencia por paternidad a cargo del empleador por una licencia parental equivalente a la regulada por la LCT a cargo de la seguridad social.

A efectos de garantizar una transformación cultural de los estereotipos que ubicaban a las mujeres o personas gestantes como las encargadas de las tareas de cuidado y crianza, el proyecto incorpora la prohibición de trabajar durante las licencias tanto para las personas gestantes como para las no gestantes y adoptantes, para quienes realizan tareas en relación de dependencia comprendidos en la LCT, en el Régimen de Trabajadores Agrarios y en el Régimen Especial de Trabajadores de Casas Particulares. Del mismo modo, se extienden las licencias establecidas en la LCT a todo el sector público nacional, constituyendo un nuevo mínimo que puede a su vez ser ampliado a través de los Convenios Colectivos de Trabajo que se celebren.

El proyecto “Cuidar en Igualdad” 2 propone una legislación que posibilite el desempeño de responsabilidades similares desde los inicios de la crianza de un niño o niña, al extender los días de licencia y al establecer el derecho a gozar del período de excedencia, sean estos trabajadores gestantes o no gestantes en ambos casos. Ello busca reducir las desigualdades en las tareas de cuidado, así como la desigual participación económica que se verifica en el mercado de trabajo. Pretende contribuir a la conciliación de la vida productiva y reproductiva de las familias, independientemente de la conformación que las mismas presenten y de este modo respetar el derecho al cuidado que debe garantizarse a los niños y niñas en los primeros meses de vida, etapa fundamental en el desarrollo evolutivo, cognitivo y vincular. 

Por otra parte, la aprobación del proyecto de ley resulta central para volver a ubicar a la Argentina entre los países que brindan mayor cobertura a los trabajadores y trabajadoras, incluso a aquellos que no se encuentran en relación de dependencia. 

Lecturas recomendadas

OIT (2022). Los cuidados en el trabajo: Invertir en licencias y servicios de cuidados para una mayor igualdad en el mundo del trabajo. 

Equipo Latinoamericano de Justicia y Género (ELA) y Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) (2020). Apuntes para repensar el esquema de licencias de cuidado.

CEPAL (2016). La brecha de género en jubilaciones y pensiones: los casos de Argentina, Brasil, Chile y Uruguay

INDEC (2022). Encuesta Nacional de Uso de Tiempo 2021. Resultados preliminares. 

  1. Abogada. Especialista en asesoramiento jurídico del Estado. Sec. de Seguridad Social – MTEySS.
  2. Proyecto de Ley “Cuidar en Igualdad” | Argentina.gob.ar

Contra viento y marea. Trabajadores y sindicatos del sector audiovisual argentino y sus desafíos en la pos pandemia

Pulso Laboral N°1 Octubre 2022 ISSN en trámite

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Contra viento y marea. Trabajadores y sindicatos del sector audiovisual argentino y sus desafíos en la pos pandemia

María Noel Bulloni 1

Las particularidades del sector

El sector audiovisual es un caso particular dentro del conjunto de actividades culturales en el país. Presenta un peso y dinamismo económico apreciables, concentrando la mayor proporción del valor agregado y del empleo del sector cultural (24,9% y 28,6% respectivamente, (INDEC, 2021) y, pese a las restricciones estructurales que caracterizan su evolución, cuenta con una trayectoria productiva ciertamente notoria. Asimismo, es destacable la elevada proporción de trabajo asalariado regulado por las leyes laborales y convenios colectivos de trabajo, y la relevancia que históricamente adquiere la representación sindical, lo cual constituye una rareza en el ámbito internacional y en otros sectores del campo cultural, donde predominan tendencias hacia la individualización y deslaboralización.

Este sector se encuentra conformado por diversos segmentos y actividades, cada uno con desarrollos productivos y problemáticas laborales particulares. En tal sentido, podemos distinguir dos grupos principales: por un lado, las actividades de radiodifusión (que concentran el grueso del empleo estable y que continuaron funcionando durante la pandemia debido a sus características de “esenciales”) y, por el otro, las actividades de producción de contenidos (para cine, publicidad, televisión, internet) mayormente asociadas con el trabajo esporádico (eventual, por proyectos y, por ende, precario) y que, con la irrupción de la pandemia, quedaron totalmente paralizadas durante largos meses.

Trabajo y trabajadores del sector frente a la pandemia

Sin dudas, la pandemia contribuyó a visibilizar esta problemática en los ámbitos políticos y sectoriales, desde donde se promovieron diversos informes y relevamientos que dan cuenta de un agravamiento de la condición precaria del trabajo y de sus desigualdades intrínsecas como así también de las respuestas que se fueron articulando desde el Estado y desde el propio campo laboral y sindical en este y otros sectores de la cultura del país y de la región.

Desde estos estudios se pone en evidencia que el rol del Estado y de las políticas públicas resulta un factor clave para el sostenimiento de los trabajadores culturales, la reactivación de la actividad, la generación de trabajo y la promoción del consumo en los sectores de la cultura. Pese al cuadro de flexibilidad y precariedad laboral fragmentado predominante, en ciertos contextos y escenarios el plano de la organización colectiva actualiza su vigencia. Concretamente, se advierte que, en ciertos casos, las organizaciones sindicales y profesionales han cumplido un papel estratégico en esta situación de emergencia.

La relevancia del accionar sindical

Cabe aquí enfatizar el accionar de los sindicatos del audiovisual argentino frente a la crisis, organizando y gestionando medidas de apoyo económico en articulación con organismos gubernamentales, motorizando la elaboración y puesta en marcha de protocolos consensuados para el retorno de los rodajes, entre otras medidas.

La marcada recuperación de la actividad económica y del empleo sectorial que se viene registrando desde el último año que, según estadísticas sindicales y otras evidencias menos exhaustivas relevadas en los segmentos de interés podemos señalar que en 2021 ha sido del orden del 200% respecto del año previo, promueve un horizonte auspicioso no sólo en términos de empleo/cuantitativos sino también para retomar la lucha por resguardar y amplificar una regulación laboral protectoria pese a la histórica condición de intermitencia y precariedad del trabajo profundizada y evidenciada durante la pandemia de manera contundente.

Gentileza: Ezequiel Barrella

En este marco, podemos destacar el reciente e inédito logro del Sindicato de la Industria Cinematográfica Argentina, Animación Publicidad y Medios Audiovisuales (SICA APMA) relativo a la creación de un fondo de maternidad generado a partir de un incremento en el aporte patronal destinado a implementar una asignación sindical para personas gestantes desempleadas. Esta conquista incorpora una perspectiva de género en el desafiante camino hacia la regulación y protección social del trabajo eventual mayoritario de sus bases, y se suma a otros logros de relevancia como el acceso a la jubilación, el seguro de desempleo y la asignación por prenatal, derechos laborales inaccesibles hasta hace escasos años.

Claro que estos logros deben ser puestos en relación con un proceso más amplio de recuperación de condiciones y regulaciones del trabajo audiovisual impulsado por el accionar de los históricos sindicatos que tienen representación sobre estos colectivos en articulación con la orientación de la política estatal en esta esfera durante los gobiernos kirchneristas (además del SICAAPMA, podemos mencionar el Sindicato Argentino de Televisión – SATSAID, la Asociación Argentina de Actores – AAA, el Sindicato Único de Trabajadores del Espectáculo Público – SUTEP). En este proceso se alcanzaron resultados importantes que cristalizan la correlación de fuerzas de esos años: se restableció y preservó el reconocimiento de la relación de dependencia contra diversas formas fraudulentas de contratación, se instalaron pisos mínimos de protección y de condiciones laborales, limitando la discrecionalidad patronal de manera significativa. Es cierto también que las lógicas flexibilizadoras/precarizadoras no desaparecieron por estos años y que, como era de esperar, luego se agudizaron frente a la reedición de un contexto político e institucional más regresivo en materia laboral en el que fueron predominantes estrategias gremiales de corte más defensivo.

Próximos desafíos

Luego de los críticos meses de parálisis de la actividad a causa de la pandemia, el retorno a la actividad y, de manera más amplia, un nuevo escenario de la pospandemia detona nuevos interrogantes y agudiza la necesidad de seguir avanzando en la comprensión de los rasgos que adquiere la cuestión laboral y sindical del campo audiovisual, sus tensiones, desigualdades y respuestas colectivas más destacadas, teniendo en cuenta sus particularidades sectoriales y sus contextos institucionales específicos. En este sentido, las ventanas de exhibición vía internet y, más específicamente, las plataformas audiovisuales over the top (OTT) tiene una importancia destacada para comprender la realidad laboral actual del sector, transformándose en poco tiempo en uno de los más importantes demandantes de contenidos para la producción local, tanto televisiva (series) como cinematográfica (películas). Esta circunstancia plantea un escenario complejo de oportunidades y problemáticas laborales que debemos analizar con detenimiento, pero desde ya podemos afirmar que vienen demandando nuevos y renovados esfuerzos a las organizaciones sindicales para sostenerse en su singular defensa de los intereses y derechos colectivos del sector, contra viento y marea.

Lecturas recomendadas

El sector audiovisual y del espectáculo en vivo ante la pandemia. Un estudio sobre los impactos en el trabajo y las respuestas sindicales en ocho países de América. https://citra.org.ar/metodo-citra-vol-10/

  1. Investigadora CIC CONICET en CITRA. Docente e investigadora UNAJ. Doctora en Ciencias Sociales por la UBA.

Coyuntura Laboral: Principales Indicadores

Pulso Laboral N°1 Octubre 2022 ISSN en trámite

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Coyuntura laboral: Principales Indicadores¹ 

En un contexto sumamente complejo como el que nos encontramos, desde el Observatorio de Condiciones de Trabajo del Centro de Innovación de los Trabajadores  (OCT-CITRA), consideramos relevante presentar de forma periódica una síntesis de los  principales indicadores laborales según las distintas fuentes disponibles, con el pro pósito de poner a disposición, un cuadro de situación actualizado sobre las variables  centrales vinculadas al mundo del trabajo.  

Es importante analizar la siguiente información en un  contexto marcado por dos procesos económicos que tienen una fuerte incidencia:  

  • Un sostenido nivel de crecimiento del producto interno bruto (PIB). En el segundo trimestre de 2022,  el PIB creció 1,0% en términos desestacionalizados respecto al primer trimestre de este año. En comparación con igual período del año anterior, registró un aumento de 6,9% en el segundo trimestre  del año².  
  • Un elevado nivel inflacionario. El nivel general del  Índice de precios al consumidor (IPC) aumentó 7,0% mensual en agosto de 2022, y acumuló, en los primeros ocho meses del año, una variación de 56,4%. En la comparación interanual registró un incremento de 78,5%³.  

Los indicadores que se presentan a continuación son los más recientes que se encuentran disponibles por los distintos sistemas de información gubernamentales.  

Empleo desocupación y subocupación 

Al analizar lo ocurrido en relación a los principales indicadores sobre el mercado  de trabajo, resulta necesario recurrir a la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) del  Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) que realiza una medición continua  sobre la población urbana en la Argentina. Se relevan de forma trimestral 31 aglomera dos urbanos, con un alcance de 29,1 millones de personas.  

Los principales resultados de la última medición disponible vinculada al segundo  trimestre de 2022⁴ (cuadro 1) da cuenta que:  

  • La población ocupada pasó de 12,0 millones a 13.0 millones, por lo cual la tasa  de empleo aumentó más de 3 puntos porcentuales (p.p.) de 41,5% a 44,6%.  » La tasa de empleo se calcula: Ocupados/ Total de la población.  
  • El desempleo disminuyó a 0,9 millones de personas siendo en el mismo trimestre del año anterior de 1,3 millones, de esta forma la tasa de desempleo descendió casi 3 p. p. (de 9,6% a 6,9%). Es el registro más bajo desde el 2° trimestre de  2015 en el que alcanzó el 6,6%⁵.  

» La tasa de desempleo se calcula: Desocupados / Población Económica mente Activa – PEA (Ocupados + trabajadores desocupados). 

  • También se observa un descenso de la subocupación de 1,645 millones de personas a 1,552 millones. Con lo cual se verifica una disminución en la tasa de  subocupación de más de 1 p.p. (de 12,4% a 11,1%). Entre los subocupados que  demandan trabajo también se observa una reducción de 0,8 p.p. (de 8,5% a 7,7%).  

» Los trabajadores subocupados son quienes trabajan menos de 35 horas semanales y están dispuestos a trabajar más horas.  

  • La contracara de la subocupación puede encontrarse en que el 27,4% de las  personas con al menos una ocupación se encuentran sobreocupadas. 

» Los trabajadores sobreocupados son quienes trabajan más de 45 horas semanales. 

  • La presión sobre el mercado de trabajo  (suma de personas desocupadas, ocupadas  demandantes de empleo y ocupadas no de mandantes disponibles) registró 28,8%, es decir levemente por encima del mismo trimestre del año anterior (25,5%). Este indicador se encuentra significativamente por debajo del 2° trim. de 2019 con una disminución de 6,8 p.p. (35,6%).  

Se destaca del análisis en particular de distintos  colectivos poblacionales que:  

  • La tasa de desocupación de las mujeres es  significativamente mayor que para los varones (7,8% y 6,1%, respectivamente).  
  • En el caso de los jóvenes de 14 a 29 años, la  tasa de desocupación verificó la mayor disminución, tanto para mujeres como  para varones: en el primer caso, la tasa pasó de 22,4% a 13,1% (9,3 p.p.); y en el  segundo, pasó de 16,1% a 12,6% (3,5 p.p.). 

Pobreza e indigencia 

A partir del reciente informe Incidencia de la pobreza y la indigencia en 31 aglomerados urbanos”  surgen importantes elementos para el análisis de coyuntura socioeconómica. 

  • 2,7 millones de hogares (27,7%) y 10,6 millones de personas (36,5 %) se encuentran  en situación de pobreza (cuadro 2).  

» Hogares y personas que no llegan a cubrir con sus ingresos la canasta básica  total.

  • 660 mil de hogares (6,8%) y 2,8 millones de personas (8,8%) se encuentran en situación de pobreza (cuadro 2). 

» Hogares y personas que no llegan a cubrir con sus ingresos la canasta básica  total.  

Con respecto al segundo semestre de 2021, la incidencia de la pobreza registró una  reducción de 0,2 p.p. en los hogares y de 0,8 p.p. en las personas. En el caso de la indigencia, mostró un aumento de 0,7 p.p. en los hogares y de 0,6 p.p. en las personas. 

Entre otros aspectos, resulta sumamente preocupante, que al examinar a los grupos  de edad según condición de pobreza, se destaca que un poco más de la mitad (50,9%)  de las personas de 0 a 14 años son pobres.  

Inserción ocupacional y sector 

Del informe Mercado de trabajo. Tasas e indicadores socioeconómicos (EPH). Segundo trimestre de 2022” se desprenden también otra información por demás significativa.  

En este periodo, el análisis por categoría ocupacional (cuadro 3), muestra que el trabajo asalariado continúa su recuperación luego de la pandemia. Los asalariados mostraron un aumento relativo de casi 1 p.p. en el segundo trimestre de  2022 (73,5%) respecto a 2021 (72,6%). Aunque aún se encuentran por debajo de  los niveles del mismo periodo de 2019 (74,1%). 

  • En el caso del cuentapropismo se registró una disminución de 0,9 p.p. Pasó de  23,2% a 22,3%. Estos niveles se acercan a los guarismos del 21,8% de la medición  realizada en el 2° trim. de 2019.  
  • Es importante advertir que si bien se produjo un aumento del trabajo asalariado  también se registró un aumento de 6,3 p.p. en la proporción de personas que  cuentan sin descuento jubilatorio, pasó del 31,5% a 37,8%. Con lo cual, es posible  examinar que en la medida que se verificó una creación en los puestos de trabajo, de igual modo se intensificó el proceso de precarización laboral. Incluso los niveles de trabajo no registrado son mayores en relación al mismo trimestre del  2019, con una diferencia de 3,3 p.p.  

También se observa que entre la población ocupada (cuadro 4), el sector estatal  registró un descenso del 20,1% al 17,7 (2,5 p.p.) mientras el sector privado aumentó del  78,1% al 80,8% (2,7 p.p). En el caso del sector estatal, durante la pandemia se había registrado un incremento hasta alcanzar el 21,9% de la población ocupada en el 2° trim. de  2020. Los valores del 2° trim. de 2022 son levemente superiores a los del mismo período  de 2019; la diferencia es de 1,2 p.p.  

En el mismo sentido, al considerar otra fuente de información como la que proporciona el MTEySS, sobre la base del SIPA (AFIP)⁶ se observa que en la comparación  interanual, el total de trabajadoras y trabajadores con empleo asalariado se expandió un  3,5% (+336,8 mil trabajadores). Este incremento obedece, principalmente, a la expansión  del sector privado (+4,4%, 259,6 mil personas) y, en segundo orden, al crecimiento del  sector público 2,4% (79,4 mil empleos más). El trabajo en casas particulares presentó  una leve reducción durante el último año (-0,5%, 2,1 mil personas menos).  

Finalmente, el trabajo independiente en su conjunto se expandió un 11,0% (+270,4  mil trabajadores) en la comparación interanual. No obstante, la dinámica de crecimiento  fue heterogénea: el número de trabajadoras y trabajadores encuadrados en el mono tributo social mostró un crecimiento significativo (+39,9%), mientras que la cantidad de  aportantes al monotributo y al régimen de autónomos presentó un incremento moderado (+6,5% y +4,1%). 

El empleo por rama de actividad 

En relación al empleo, el mismo informe del MTEySS “Situación y evolución del Trabajo Registrado” publicado en el mes de septiembre de 2022, con datos de junio del  corriente año, da cuenta de lo ocurrido por rama de actividad. Al examinar en términos  interanuales, son 11 los sectores -de los 14 analizados- los que mostraron variaciones  positivas. Entre ellos, los de mejor desempeño fueron: hoteles y restaurantes (+23,3%),  construcción (+16,3%), explotación de minas y canteras (+5,1%), y comercio y reparaciones (+4,8%). En contraposición, intermediación financiera (-0,7%), servicios sociales y de  salud (-0,9%), y agricultura, ganadería, caza y silvicultura (-2,6%) presentaron una reducción en el número de empleados.  

El empleo asalariado registrado en el sector hoteles y restaurantes atravesaba por  una fase contractiva antes de la pandemia. Esta tendencia se profundizó con el inicio  de la emergencia sanitaria. No obstante, el sector  comenzó a mostrar tasas de variación positivas en marzo y abril de 2021, retrocedió en mayo y junio de ese año, y volvió a mostrar resultados positivos en los últimos 12 meses. Más allá de esta recuperación, el deterioro al inicio de la pandemia fue tan  profundo que su nivel de empleo actual se ubica 4,2% por debajo del vigente en febrero de 2020.

La construcción presenta 23 meses consecutivos con variaciones mensuales positivas. La variación del +1,3% correspondiente a junio 2022 llevó su nivel de empleo un 11,5% por encima del nivel previo al inicio de la pandemia. Sin embargo, todavía se encuentra un 7,8% debajo del  máximo alcanzado por el sector en marzo de 2018. 

La explotación de minas y canteras viene mostrando variaciones positivas desde  hace 19 meses. Sin embargo se trata de un sector que alcanzó su máximo empleo a  inicios de 2015 y a partir de ahí se ha encontrado fluctuando alrededor de una tendencia  decreciente. En junio de 2022 el empleo en este sector se encuentra un 3% por debajo  del valor máximo. Queda por verificar si la fase actual de recuperación logra sostenerse  y romper con la dinámica de los últimos años. 

La dinámica del sector comercio, dada su importancia como sector empleador, resulta fundamental para entender el comportamiento del conjunto del empleo asalariado formal. Este sector registra crecimiento desde enero de 2021, y el empleo supera el  nivel previo al comienzo de la pandemia (febrero 2020) en +3,6%. Sin embargo, aún se  encuentra un 2,1% por debajo del máximo alcanzado por el sector en diciembre de 2017. 

La industria manufacturera verificó un incremento de 0,6%, acumulando 25 meses  de crecimiento consecutivo del empleo, y alcanzando así un nivel de empleo formal  similar al de septiembre de 2018. Ya superó el nivel de empleo previo al inicio de la pandemia (+6,4%) pero aún se encuentra lejos del máximo alcanzado en octubre de 2013  (-8,8%). Durante el último mes el crecimiento fue generalizado al interior del sector, sin  embargo las ramas más dinámicas fueron textiles y confecciones (+1,1%) y automotores  (+1,0%).

El único sector que no logró crecer en el mes de junio es servicios sociales y de salud, el cual se mantuvo estable en comparación con el mes anterior. 

Desvinculaciones y suspensiones  

Al analizar lo ocurrido en relación a las modalidades legales de las desvinculaciones  de trabajadores de empresas del sector privado, en la última medición publicada de la  Encuesta de Indicadores Laborales (EIL) se observa un incremento significativo de los  despidos sin causa al comparar el mes de julio de este año en relación con el mismo  mes del año anterior. Los despidos sin causa se duplicaron al pasar del 3,4% al 7,5% (cuadro 5). Este proceso parece darse junto al fin de la doble indemnización, que mediante  el decreto 886/21, había determinado una reducción gradual desde el mes de enero  hasta junio de este año.  

Si se establece, como referencia un contexto completamente diferente como el de  julio de 2019, se observa una merma sustancial de este indicador (8,7 p.p), al alcanzar en  ese momento el 16,2%.  

Junto con la reactivación de la actividad económica, se verifica una reducción sostenida del personal suspendido (cuadro 6), ubicándose actualmente en valores incluso  menores a los de la pre pandemia. En efecto, el porcentaje de empleo suspendido pasó del pico de 8,8% registrado en mayo de 2020, a 0,3% en julio de 2022 (valores similares  se observan desde enero de 2021).  

Por su parte, en julio de 2020 se había registrado un máximo de 19,4% de empresas  que aplicaron suspensiones, descendiendo a 4,9% en junio de 2022 

A modo de síntesis 

En un contexto de sostenida actividad económica y alta inflación puede observarse  a partir de los últimos indicadores disponibles: 

  • Un importante crecimiento en los niveles del empleo y un descenso de la des ocupación.  
  • Pese a la leve disminución de la subocupación se mantienen los niveles de los  distintos indicadores que constituyen de forma agregada la presión sobre el  mercado de trabajo.  
  • Se registra una pequeña reducción en la cantidad de hogares y personas en  situación de pobreza aunque la cantidad de hogares y personas en situación  de indigencia se incrementó.  
  • Una recuperación en el trabajo asalariado y una caída – en términos relativos- del cuentapropismo en cuanto a la inserción ocupacional.  
  • Un aumento de la precarización laboral entre los trabajadores en relación de  dependencia.  
  • Un crecimiento en la proporción del empleo privado con respecto al sector  público que tiende a equiparar los niveles previos a la pandemia.  
  • Las ramas de actividad que muestran una mayor variación positiva en términos interanuales en cuanto al trabajo registrado son hoteles y restaurantes y  construcción. En contraposición, servicios sociales y de salud, intermediación  financiera, y agricultura, ganadería, caza y silvicultura presentaron una reducción en el número de empleados.  
  • Un crecimiento en términos relativos de los despidos sin causas entre las modalidades legales de desvinculación de personal. 
  • Una reducción significativa del personal suspendido, incluso por debajo de los  valores previos a la pandemia. 

Lecturas recomendadas 

CIFRA (2022). La distribución del ingreso en la etapa actual.  

CEPAL (2022) Coyuntura laboral en la Argentina: empleo joven y transición a la  formalidad laboral 

CEPA (2022). Desempeño de las principales empresas argentinas (2015-2022):  análisis de las ventas, rentabilidad y costos laborales en los Estados Contables.

Galería de pictogramas de Gerd Arntz (1900-1988)

  1. Informe elaborado  por Federico Vocos  (OCT – CITRA / CONICET).  
  2. Informe de avance del nivel de actividad. Primer trimestre de  2022 https://www.indec.gob.ar/uploads/informesdeprensa/pib_09_2250938E28EA.pdf
  3. Índice de Precios al Consumidor (IPC). Cobertura nacional.  Junio de 2022 https://www.indec.gob.ar/uploads/informesdeprensa/ipc_09_221BCA18CD32.pdf
  4. Mercado de trabajo. Tasas e indicadores socioeconómicos (EPH). Primer  trimestre de 2022 https://www.indec.gob.ar/uploads/informesdeprensa/mercado_trabajo_eph_2trim228FD416F03D.pdf
  5.  MTEySS. Boletín  de Estadísticas Laborales (BEL). Tasa  de desocupación  según características  socioeconómicas. https://www.trabajo.gob.ar/downloads/estadisticas/bel/107141.xlsx
  6. Situación y evolución del Trabajo Registrado. Septiembre

La Salud y Seguridad en el Trabajo son un Derecho Fundamental 

Pulso Laboral N°1 Octubre 2022 ISSN en trámite

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La Salud y Seguridad en el Trabajo son un Derecho Fundamental

Cobertura especial de RELATS en la 110.ª reunión de la Conferencia Internacional del  Trabajo para “Pulso Laboral” 

Claudio San Juan 1

“el término salud, en relación con el trabajo, abarca no solamente la ausencia de afecciones  o de enfermedad, sino también los elementos físicos y mentales que afectan a la salud  y están directamente relacionados con la seguridad e higiene en el trabajo” 

(Artículo 3 del Convenio 155 de la OIT) 

La Conferencia Internacional del Trabajo, con fecha 10 de junio de 2022, adoptó la Resolución  sobre la inclusión de un entorno de trabajo seguro y saludable en el marco de la OIT relativo a los principios y derechos fundamentales en el trabajo 2

La decisión de la Conferencia significa que la salud y seguridad en el trabajo (SST) pasa a ser el quinto derecho que se suma a los cuatro derechos adoptados en 1998 por la Organización  Internacional del Trabajo (OIT): 

  1. la libertad de asociación y la libertad sindical y el reconocimiento efectivo del derecho a  la negociación colectiva; 
  2. la eliminación de todas las formas de trabajo forzoso u obligatorio; 
  3. la abolición efectiva del trabajo infantil; y 
  4. la eliminación de la discriminación en materia de empleo y ocupación. 

Ello significa que todos los Estados miembros de la OIT se comprometen a respetar y  promover el derecho fundamental a un entorno de trabajo seguro y saludable, hayan ratificado  o no los Convenios correspondientes. 

En la práctica 

El derecho a un entorno de trabajo seguro y saludable, a partir de la resolución citada se rige  por dos normas internacionales del trabajo consideradas convenios fundamentales: 

• Convenio sobre seguridad y salud de los trabajadores, 1981 (núm. 155)  

• Convenio sobre el marco promocional para la seguridad y salud de los trabajadores, 2006  (núm. 187). 

Los compromisos y requerimientos de estos convenios se deben aplicar en dos niveles: a  nivel nacional y a nivel empresa. 

Los Estados miembros de la OIT deben cumplir los siguientes compromisos a nivel nacional,  previa consulta con las organizaciones de trabajadores y empleadores: 

  • formular, poner en práctica y reexaminar periódicamente una Política Nacional coherente  en materia de seguridad y salud de los trabajadores y medio ambiente de trabajo; 
  • adoptar, por vía legislativa o reglamentaria las medidas necesarias para dar efecto a la Política Nacional de SST. 
  • elaborar, aplicar, controlar y reexaminar periódicamente un Programa Nacional de SST; 
  • preparar y actualizar un Perfil Nacional de SST, como resumen de la situación existente  en la materia y de los progresos realizados, que sirva de base para reexaminar la política  y el programa nacional de SST. 

A nivel empresa se debe exigir a los empleadores, entre otras medidas: 

• garantizar que los lugares de trabajo, la maquinaria, el equipo y las operaciones, procesos, los agentes y las sustancias químicos, físicos y biológicos que estén bajo su  control no entrañan riesgos para la salud cuando se toman medidas de protección  adecuadas. 

• suministrar ropas y equipos de protección apropiados a fin de prevenir, en la medida  en que sea razonable y factible, los riesgos de accidentes o de efectos perjudiciales  para la salud. 

También deberán adoptarse disposiciones a nivel de empresa en virtud de las cuales, los  trabajadores y sus representantes: 

Collage: Federico Geller

• al llevar a cabo su trabajo, cooperen al cumplimiento de las obligaciones que incumben  al empleador en el ámbito de la SST; 

• reciban información adecuada acerca de las medidas tomadas por el empleador para  garantizar la SST y puedan consultar a sus organizaciones representativas acerca de  esta información, a condición de no divulgar secretos comerciales; 

• reciban una formación apropiada en el ámbito de la seguridad e higiene del trabajo; 

• estén habilitados para examinar todos los aspectos de SST, y sean consultados a este  respecto por el empleador; con tal objeto, y de común acuerdo, podrá recurrirse a  consejeros técnicos ajenos a la empresa; 

• informen de inmediato a su superior jerárquico directo acerca de cualquier situación de  trabajo que a su juicio entrañe, por motivos razonables, un peligro inminente y grave para  su vida o su salud; mientras el empleador no haya tomado medidas correctivas, si fuere  necesario, no podrá exigir de los trabajadores que reanuden una situación de trabajo en  donde exista con carácter continuo un peligro grave e inminente para su vida o su salud. 

• Cooperen con los empleadores, por ser un elemento esencial de las medidas en materia  de organización y de otro tipo que se adopten en aplicación de las disposiciones antes  citadas. 

• Las medidas de SST no impliquen ninguna carga financiera para los trabajadores. 

La situación en Argentina 

En la Argentina durante el año 2021 se registraron 314.356 accidentes de trabajo y  enfermedades profesionales con días con baja laboral. Este panorama estadístico, agravado  por 314 muertes en ocasión del trabajo 3

Cabe destacar que el promedio anual de trabajadores cubiertos por el Sistema de Riesgos  del Trabajo es de 9.586.056. 4 

Respecto de los compromisos con el cumplimiento de los convenios 155 y 187, el 21 de  noviembre de 2012, el Comité Consultivo Permanente de la Ley de Riesgos del Trabajo, entre  otros temas: 

• Aprobó la “Política Nacional de Salud y Seguridad de los Trabajadores y del Medio  Ambiente de Trabajo”, y 

• Ratificó la “Estrategia Argentina de Salud y Seguridad en el Trabajo 2011 – 2015”5

Lo importante de estos dos instrumentos suscriptos a partir del consenso tripartito entre los  representantes del sector gobierno, trabajador y empleador, tuvieron su continuidad en la “II  Estrategia Argentina de Salud y Seguridad en el Trabajo 2015 – 2019” 6 , luego del  cumplimiento de las metas, objetivos generales y específicos, conforme lo establecido en el  plan de acción de la primera estrategia. 

Lamentablemente, el gobierno entrante el 10 de diciembre de 2015 dejó sin efecto la II  Estrategia Argentina de SST. 

De igual manera resulta fundamental: 

• Dictar una nueva ley de “Higiene y Seguridad en el Trabajo”, con base en los principios y  derechos fundamentales en el trabajo. 

• Ejecutar una política pública y programa nacional en materia de Salud y Seguridad en el  Trabajo. 

• Aprobar el proyecto de Ley de “Comités Mixto de Seguridad, Salud, Medio Ambiente y  Prevención de Riesgos en el Trabajo”, enviado por el PEN mediante Mensaje Nº  91/2021 . 

A modo de cierre 

Es posible plantear que: 

  • La ratificación de los convenios 155 y 187 constituyó para Argentina un punto de partida para el cumplimiento de los principios y derechos fundamentales.
  • La Resolución sobre la inclusión de un entorno de trabajo seguro y saludable en el marco de la OIT, además de elevar la SST a derecho fundamental, establece una hoja de ruta para una política de Estado.
  • La hoja de ruta deberá contener las acciones para el cumplimiento de compromisos y requerimientos de los convenios fundamentales de SST se deben aplicar en dos planos: a nivel nacional y a nivel empresa.

Lecturas recomendadas 

 

1. Lic. en Higiene y Seguridad en el Trabajo. Mg. en Derecho del Trabajo y Relaciones Internacionales. Miembro de la “Red Euro-Latinoamericana de Análisis sobre Trabajo y Sindicalismo” (RELATS),  http://www.relats.org/ 

 2. https://ilo.org/wcmsp5/groups/public/—ed_norm/— relconf/documents/meetingdocument/wcms_848653.pdf 

3. https://www.srt.gob.ar/estadisticas/acc_ultimos_datos.php

4. (Un resumen de los derechos y obligaciones en https://www.argentina.gob.ar/srt/trabajadores/derechos-y-obligaciones 

5. http://publicaciones.srt.gob.ar/Publicaciones//2013/Folletos/PoliticaNacional.pdf

6. https://www.srt.gob.ar/wp-content/uploads/2018/09/IIESTRATEGIA_ARGENTINA_SST_2015- 2019.pdf 

7. Para un análisis de este proyecto ver https://redsstalc.blogspot.com/2022/04/participacion-de-las-trabajadoras-y-los.html

 

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Pulso Laboral n°1. Presentación

Pulso Laboral N°1 Octubre 2022 ISSN en trámite

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Presentación

Estimadas compañeras y compañeros, nos resulta muy grato presentarles este primer número de Pulso Laboral, publicación del Observatorio de Condiciones de Trabajo (OCT) que integra el Centro de Innovación de los trabajadores (CITRA – CONICET / UMET).

Con esta nueva publicación queremos poner a disposición, a partir de artículos breves, información que consideramos sumamente valiosa vinculada a las condiciones de trabajo. Nos proponemos reunir un conjunto de materiales que nos posibiliten acceder, conocer y abordar de forma crítica sus dimensiones y problemáticas.

Los artículos actúan como una aproximación, compartiendo lo elaborado por trabajadores/as, dirigentes/as sindicales, profesionales e investigadores/as de distintos centros tanto académicos como gubernamentales y de igual manera se proponen actuar como un disparador sobre las distintas temáticas.

Nos resulta clave también, articular iniciativas ya existentes, dando difusión a los sistemas de información disponibles, y fortalecer los vínculos de cooperación entre aquellas instituciones que investigan sobre los distintos aspectos relacionados a las condiciones de trabajo.

En Pulso Laboral están contemplados distintos apartados. En primer lugar, en cada número se examinarán los principales indicadores laborales que componen el mercado de trabajo, de forma tal que posibilite un análisis de la coyuntura laboral.

De igual modo, está previsto abordar el aspecto normativo. Tanto novedades vinculadas al plano internacional, como así también propuestas o proyectos que se estén debatiendo en nuestro país. En esta edición se presentan la Declaración por parte de la OIT de la salud y seguridad en el trabajo como derecho fundamental, la ratificación del Convenio 190 sobre Violencia Laboral y el proyecto Cuidar Argentina vinculado a las licencias en las tareas de cuidados.

Cada número también presentará un panorama de un sector en particular, como a su vez se pondrá especial énfasis en las experiencias desarrolladas por los sindicatos en materia de salud y seguridad en el trabajo. En este primer número, se aborda la especificidad del sector audiovisual en la pos pandemia y se expone la construcción sindical que viene desarrollando el Espacio Intersindical Participación, Salud y Trabajo. A su vez se presenta el programa de formación sindical organizado desde la Diplomatura en Condiciones y Medio de Trabajo (CyMAT) creado por ATE Capital.

Asimismo, presentamos una nueva herramienta que ponemos a disposición desde el OCT: el Repositorio Digital Sindical sobre Condiciones de Trabajo. A partir de la creación del sitio https://repositorio.citra.org.ar/ buscamos preservar, organizar, dar visibilidad y difundir, la importante producción realizada por distintas organizaciones sindicales de Argentina sobre esta temática.

Cada edición incluirá un breve artículo en el que haremos referencia a un aspecto teórico, como así también de una destacada experiencia internacional. En este caso se realiza una primera aproximación a Pensar la relación salud – trabajo, y entrevistamos a la fundadora de la Colectiva de Mujeres Hondureñas (CODEMUH).

En esta edición agregamos, además, una brevísima historia de la formación profesional en Argentina, y también rendimos homenaje a Victorio Paulón, gran dirigente del movimiento obrero, que nos dejó hace poco tiempo.

Por último, queremos agradecer especialmente a los autores y autoras de los artículos por haberse sumado a esta iniciativa: Claudio San Juan, María Noel Bulloni, Lilian Capone, Lali Feldman, Gladys Zena, Juliana Boli de Lebrón, María Luisa Regalado y Armando Belmes. A todos ellos, nuestro agradecimiento.

Esperamos con este material generar una herramienta para todas y todos aquellos que se interesan por el mundo del trabajo. Los invitamos a difundirlo y participar.

Juan E. Bonnin y Federico Vocos

Pulso Laboral N°1

Pulso Laboral N°1

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Octubre de 2022 – Publicación del Observatorio de Condiciones de Trabajo – ISSN 2953-4747

Pulso Laboral es una publicación periódica de información sobre condiciones de trabajo. Se reúnen un conjunto de materiales que posibilitan acceder y abordar de forma crítica sus dimensiones y problemáticas como a su vez conocer las distintas experiencias desarrolladas por las organizaciones sindicales en materia de salud laboral.