Informe elaborado por Federico Vocos
Observatorio de Condiciones de Trabajo (OCT – CITRA / CONICET)
Introducción
A partir de distintos sistemas de información disponibles se presentan a continuación los principales indicadores laborales, con el propósito de poner a disposición, un panorama actualizado de las dimensiones centrales vinculadas al mundo del trabajo en la Argentina.
En este sentido, es relevante analizar la información disponible a partir de un contexto marcado por dos procesos económicos que se acentuaron luego de la devaluación del 118% realizada por la nueva gestión de gobierno a comienzos de diciembre último. En este sentido es posible examinar:
- Un muy elevado nivel inflacionario. El nivel general del Índice de precios al consumidor (IPC) resulta por demás elevado. La inflación acumulada durante los primeros 7 meses de la actual gestión alcanza el 125,5% y la variación porcentual acumulada en los últimos 12 meses es de 271,5%. La magnitud del alza en el proceso inflacionario se advierte en que la variación interanual del nivel general del IPC desde diciembre supera el 200% y desde hace 5 meses es mayor al 270%. Hace un año, en junio del 2023 la inflación interanual era del 115,6% (gráfico 1)[1].
- La economía ingresó en el primer trimestre de 2024 en una etapa de depresión, luego del derrumbe de la actividad económica. La estimación para el primer trimestre de 2024 del producto interno bruto (PIB) es de -2,6% en términos desestacionalizados respecto al 4° trimestre de 2023 y de -5,1% respecto al mismo periodo del año anterior. En este periodo, se registra un fuerte descenso en la Inversión con una disminución de -23,4% interanual y del Consumo privado de -6,7% interanual[2].
El estimador mensual de actividad económica (EMAE) de mayo marca la gravedad de la situación económica. Al considerar todos los sectores, salvo Agricultura, ganadería, caza y silvicultura, la caída es de -5,04%. Son nueve los sectores de actividad que registran caídas en la comparación interanual, entre los que se destacan Construcción (-22,1% ia) e Industria manufacturera (-14,2% ia) y Comercio mayorista, minorista y reparaciones (-11,41% ia)[3].
Las temáticas que aborda el presente informe son: Empleo, desocupación y subocupación; Pobreza e Indigencia; Situación de los ocupados; Empleo por rama de actividad; Incorporaciones, desvinculaciones y suspensiones y Salarios.
Empleo, Desocupación y Subocupación
Los principales indicadores del mercado laboral provistos por la Encuesta Permanente de Hogares (EPH – INDEC) nos permiten examinar el impacto de las primeras medidas de la actual gestión gubernamental en materia de empleo. A partir de los últimos datos disponibles publicados en junio último[4], realizado sobre 31 aglomerados urbanos y con un alcance de 29,6 millones de personas, es posible advertir para el primer trimestre de 2024 (cuadro 1):
- Una disminución de la población ocupada de 77 mil personas respecto al primer trimestre de 2023, por lo cual la tasa de empleo disminuyó de 45,0% a 44,3% (-0,7 puntos porcentuales – p.p.). A la vez entre el 4° trimestre de 2023 y el 1° trimestre de 2024 los ocupados disminuyeron del 45.8% a 44.3% (-1,5 p.p.) cuando en igual periodo entre 2022 y 2023 se había registrado un incremento de 44,6% a 45,0% (+0.5 p.p.) lo que da cuenta del fuerte impacto de la política económica del nuevo gobierno[5].
→ 🤚 La tasa de empleo se calcula: Ocupados/ Total de la población.
- En relación a la desocupación en el primer trimestre del año, la población desocupada alcanzó 1.088 millones de personas (7,7%, +0,8 p.p.), 114 mil más que un año atrás. Por otra parte, no hay registro de un incremento de esta magnitud en la tasa de desocupación (+2 p.p.) entre un 4 trim. y un 1° trim. desde la revisión de la EPH en 2016.
→ 🤚 La tasa de desempleo se calcula: Desocupados / Población Económicamente Activa – PEA (Ocupados + trabajadores desocupados).
- En el primer trimestre de 2024 se registró una pequeña disminución en la subocupación (de 10,5% a 10,2%), aunque si se examina en particular a los subocupados que demandan trabajo, se observa un leve crecimiento (de 6,8% a 7,0%).
→ 🤚 Los trabajadores subocupados son quienes trabajan menos de 35 horas semanales y están dispuestos a trabajar más horas.
→ 🤚 Los trabajadores subocupados demandantes son quienes además de trabajar menos de 35 horas semanales, buscan activamente otra ocupación.
- Al examinar la presión sobre el mercado de trabajo (29,5%) se registra una suba 2,1 p.p. en el primer trimestre de 2024. Este proceso se diferencia de lo ocurrido un año atrás, cuando la presión sobre el mercado de trabajo disminuyó 1,3 p.p. en el pasaje del 4° trim de 2022 al 1° trim de 2023 (28,2% a 26,9%, respectivamente).
→ 🤚 El indicador presión sobre el mercado de trabajo está conformado conformado por la suma de las personas desocupadas, ocupadas demandantes de empleo y ocupadas no demandantes disponibles.
Pobreza e indigencia
El último informe oficial disponible vinculado a los índices oficiales de pobreza e indigencia[6] arrojan cifras alarmantes sobre la situación social de nuestro país durante el 2° semestre del 2023.
Entre los principales datos (cuadro 2) se destacan que:
- 3,2 millones de hogares (31,8%) y 12,3 millones de personas (41.,7 %) se encontraron en situación de pobreza.
→ 🤚 Hogares y personas que no llegan a cubrir con sus ingresos la Canasta Básica Total (CBT).
- 870 mil hogares (8,7%) y 3,5 millones de personas (11,9%) se hallaron en situación de indigencia.
→ 🤚 Hogares y personas que no llegan a cubrir con sus ingresos la Canasta Básica Alimentaria (CBA).
Al examinar lo ocurrido durante el año 2023, se observa un incremento de la incidencia de la pobreza en 300 mil hogares (+2,2 p.p.) y en 800 mil personas (+2,5 p.p.). De igual modo, la indigencia, aumentó en 256 mil hogares (+2,5 p.p.) y en 1 millón de personas (+3,8 p.p.).
Si se analiza lo ocurrido en la anterior gestión gubernamental, impacta cómo desde el 2° semestre de 2019[7] se agrava la situación social, a partir de un aumento sustantivo de la incidencia de la pobreza tanto en hogares (800 mil, +5,9 p.p) como en personas (2,4 millones, +6,2 p.p,). También se registra un incremento sustancial en la incidencia de la indigencia en los hogares (334 mil, 3.0 p.p.) y en las personas (1,2 millones, +3,9 p.p.).
Para el 2° semestre del 2024. las proyecciones realizadas por la Universidad Torcuato Di Tella (UTDT) permiten estimar la magnitud del deterioro de las condiciones de vida, al alcanzar la tasa de pobreza el 50,5%. De esta forma, de los 29,3 millones de personas que la EPH releva de población urbana, 14.8 millones de personas viven en hogares urbanos pobres[8].
Situación de los ocupados
Los datos que provee el Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA) permiten examinar un contexto por demás preocupante en cuanto a la coyuntura laboral, a partir de una destrucción significativa de puestos de trabajo.
A partir de los últimos datos disponibles, publicados en julio de 2024[9], se observa que entre diciembre de 2023 y abril de 2024, en términos desestacionalizados se perdieron 100 mil empleos en el sector privado (-1,6%) y 33.6 mil en el sector público (-1,0%). En cambio, en el mismo periodo en los años 2023/2022, se había registrado un crecimiento de 75,7 mil puestos de trabajo en el sector privado (1,2%) y 44,3 mil en el sector público (1,3%).
Desde la EPH podemos observar lo ocurrido en el mediano plazo sobre distintos aspectos vinculados a la población ocupada (cuadro 3). Centralmente se observa:
- Un incremento de los asalariados de 2,1 p.p. y una pequeña disminución de los cuentapropias en 0,8 p.p. al comparar la inserción ocupacional al 4° trim. de 2019.
- El trabajo asalariado no registrado, más allá de lo ocurrido durante la pandemia cuando alcanzó el 23,8% en el 2° trimestre de 2020, no registra valores por debajo del 35% desde el 3° trimestre de 2018. En la actualidad son 3.5 millones de trabajadores los que no disponen de descuento jubilatorio.
Otros aspectos destacados vinculados a la composición de la población ocupada, la encontramos en el crecimiento del desarrollo de las tareas laborales en la vivienda del trabajador entre el 4° trimestre de 2019 y el 1° trimestre de 2024 (1.8 p.p.). A su vez, en ese mismo lapso de tiempo se observa un incremento de los asalariados que utilizan máquinas y/o equipamiento propio para realizar su trabajo (1,5 p.p.).
El empleo por rama de actividad
En relación al empleo, las estadísticas publicadas en julio de 2024 con datos a abril de este año sobre la “Situación y evolución del trabajo registrado”[10], permiten examinar que 11 de las 14 ramas de actividad económica muestran variaciones negativas respecto al empleo en relación a diciembre de 2023 (cuadro 5). La destrucción alcanza los casi 100.000 puestos de trabajo formales, con una fuerte incidencia de la Construcción (-50.650) y la Industria manufacturera (-15.930). Por el contrario, en tan sólo 3 ramas de actividad se observa la creación de puestos de trabajo formales: Agricultura, ganadería, caza y silvicultura, Pesca, y Explotación de minas y canteras. Entre las 3 crearon 5.570 empleos.
Incorporaciones, desvinculaciones y suspensiones
A partir del relevamiento continuo en empresas del sector privado realizado por Encuesta de Indicadores Laborales (EIL) es posible ver el impacto de la depresión económica. Las contrataciones de trabajadores, medidas a través de la tasa de entrada —relación entre las incorporaciones de personal y la dotación al inicio del mes— se ubican en 1,4%, un valor bajo en términos históricos. Solo en plena crisis en mayo de 2002 (1,2%), y en mayo de 2020 por influencia de la pandemia (0,4%), las incorporaciones tuvieron un nivel inferior al actual. En términos interanuales, la tasa de entrada tuvo una contracción de 0,7 p.p.[11].
A la vez, se observa un incremento significativo de los despidos sin causa al comparar mayo de este año con el mismo mes del año anterior. Los despidos sin causa se incrementaron al pasar del 10,7% al 13,5% (cuadro 6). Este proceso se acentúa si se considera lo ocurrido en los últimos 2 años, ya que esta modalidad de despidos alcanzaba el 7,5%. En este plazo de tiempo, también se advierte un incremento de los despidos con causa y una disminución en las renuncias.
Por otra parte, desde noviembre de 2023 se registra un incremento sustantivo en las suspensiones (la tasa pasó de 4,3% a 7,4% cada 1000 trabajadores), al igual que un incremento de las suspensiones por caída de la demanda (del 1,3% al 9,3%) (cuadro 7).
Salarios
A partir de los últimos datos disponibles publicados en julio de 2024, se puede observar cómo en los primeros 6 meses de gobierno, los ingresos quedaron rezagados frente a la inflación.
La fuerte devaluación del peso a inicios de la actual gestión, señalada en el presente informe, provocó un notable incremento de los precios en los bienes y servicios. Entre diciembre de 2023 y mayo de 2024 la inflación acumulada resultó del 115,6% y los salarios tuvieron un incremento del 89,1%, por lo que se verificó en términos generales un deterioro de -26,5 p.p. del poder adquisitivo (cuadro 8)[12].
Los sectores más afectados resultaron los trabajadores privados no registrados con una merma de -48,4 p.p. en sus ingresos y los empleados estatales con -39,7 p.p. de pérdida salarial. Por otro lado, los trabajadores privados registrados experimentaron una disminución de -13,9 p.p. en sus salarios.
Si se examina lo ocurrido en términos anuales, se observa un fuerte deterioro de los ingresos de los trabajadores. Ante un incremento de nivel de precios al consumidor del 276,4% a mayo de 2024, se constató un deterioro de -60,4 p.p. en los salarios.
A la vez, se puede advertir cómo durante el transcurso del último año se acentuó el impacto diferencial en la pérdida de ingresos por sector. Los trabajadores informales sufrieron una disminución de -121,2 p.p., los empleados estatales perdieron -83,9 p.p. y los trabajadores del sector privado registraron una merma de -30,4 p.p. en sus salarios.
Estos indicadores – junto a los menores niveles de empleo y al crecimiento de la desocupación – permiten dar cuenta del aumento de la pobreza y la indigencia en nuestro país.
A modo de síntesis
En un contexto de depresión económica y un nivel elevadísimo de inflación puede observarse a partir de los últimos indicadores disponibles un contexto de extrema gravedad a partir de:
- Una disminución en la población ocupada y un aumento significativo de la desocupación.
- Un incremento entre quienes demandan un empleo o se encuentran disponibles para trabajar, lo cual incrementa la presión sobre el mercado de trabajo.
- Un aumento significativo en la cantidad de hogares y personas en situación de pobreza y de indigencia. El actual gobierno profundiza de forma acelerada el deterioro de las condiciones de vida que se habían producido en la gestión anterior.
- Se observa una destrucción de empleos formales tanto en el sector privado como en el sector público. En el sector privado, las actividades más afectadas son la Construcción y la Industria manufacturera..
- Los niveles de precarización laboral registran un estancamiento en sus valores. Más de un tercio del trabajo asalariado no tiene aportes jubilatorios.
- La tasa de incorporación de personal de las empresas de más de 10 empleados del sector privado se encuentra por debajo del nivel histórico.
- Se evidencia un aumento de los despidos sin causa y se verifica un incremento de las suspensiones por falta de demanda.
- Una pérdida significativa del poder adquisitivo de los salarios, principalmente el de los trabajadores no registrados del sector privado y de los trabajadores estatales.
Lecturas recomendadas:
- Mariana L. González (2024). Informe sobre la evolución del Salario Mínimo, Vital y Móvil. Julio 2024. CABA: CIFRA – CIFRA (CTA).
- CEPAL – OIT (2024). Coyuntura Laboral en América Latina y el Caribe: desafíos y oportunidades para la inclusión laboral de las personas jóvenes y la redistribución del trabajo de cuidados.
[1] INDEC (2024d). Índices de precios Vol. 8, n° 21. Índice de Precios al Consumidor (IPC). Cobertura nacional. Junio de 2024
[2] INDEC (2024a). Cuentas nacionales. Vol. 8 n° 9. Informe de avance del nivel de actividad. Primer trimestre de 2024. Junio de 2024.
[3] INDEC (2024b). Cuentas nacionales. Vol. 8 n° 12. Estimador mensual de la actividad económica. Mayo de 2024.
[4] INDEC (2024c). Trabajo e ingresos, Vol. 8, n° 5. Mercado de trabajo. Tasas e indicadores socioeconómicos (EPH). Primer trimestre de 2024.
[5] INDEC (2023a). Trabajo e ingresos, Vol. 7, n° 5. Mercado de trabajo. Tasas e indicadores socioeconómicos (EPH). Primer trimestre de 2023.
[6] INDEC (2023b). Condiciones de vida Vol. 8, n° .7. Incidencia de la pobreza y la indigencia en 31 aglomerados urbanos. Segundo semestre de 2023. Marzo de 2024..
[7] INDEC (2019). Condiciones de vida Vol. 4, n° 4. Incidencia de la pobreza y la indigencia en 31 aglomerados urbanos. Segundo semestre de 2019.
[8] González Rosada, M. (2024)). Nowcast de pobreza. Universidad Torcuato Di Tella (UTDT).
[9] MCH (2024a). Situación y evolución del Trabajo Registrado. Julio 2024. Datos a abril de 2024. Secretaría de Trabajo, Empleo y Seguridad Social.
[10] MCH (2024b). Estadísticas Situación y evolución del Trabajo Registrado. Julio 2024. Datos a abril de 2024. Secretaría de Trabajo, Empleo y Seguridad Social.
[11] MCH (2024c). Encuesta de indicadores laborales (EIL). Julio 2024. Datos a mayo de 2024.
[12] INDEC (2024e). Salarios. Vol. 8, n° 7. Índice de salarios. Julio de 2024.