Walter Miglionico Caino
Secretaria de Salud Laboral y Medio Ambiente (PIT – CNT).
Es necesario tener presente que nuestro Plenario Intersindical de Trabajadores – Convención Nacional de Trabajadores, PIT -CNT es la única “central” (entre comillas, plenario o convención no central) del Uruguay. Nació en la década de los 60’ como una acción unitaria de todas las vertientes sindicales, marxistas, anarquistas y cristianas que existían en nuestro país. Un paso que consideramos histórico al privilegiar la unidad.
La Secretaría de Salud Laboral y Medio Ambiente nació entre 1983 y 1986, a la salida de la dictadura cívico-militar que gobernaba nuestro país desde 1973 y al inicio de la recomposición democrática. El núcleo inicial se puede rastrear, en parte, a partir de la realización de un curso de OIT a cargo del Dr. Carlos Aníbal Rodriguez durante 1986.
Por otro lado, antes de la realización de ese curso de OIT, varios sindicatos habían dado pasos para comenzar a trabajar específicamente la temática de la “Salud y Seguridad en el Trabajo” y agruparse con aquel cometido .
Varios de los participantes de aquel curso, en conjunto con compañeros de estos sindicatos, encontraron que era una necesidad la consolidación de un colectivo de trabajo en la organización que nucleaba a los trabajadores, en ese momento el Plenario Intersindical de Trabajadores (PIT) heredero y continuador de la Convención Nacional de trabajadores (CNT), declarada ilegal por la dictadura.
La creación del Instituto Cuesta Duarte
En ese entonces, se comenzó a diagramar el área de investigación y formación del PIT-CNT, que luego de un proceso en los años 1988-1989 dio lugar a la creación del Instituto Cuesta Duarte. Su creación permitió incluir en sus programas de formación los contenidos que aportaba y aporta nuestra secretaria.
Queríamos recuperar esa “década perdida” recreando las organizaciones populares que habían sido acalladas, prohibidas, encadenadas mediante el terror y la represión. Los colectivos que comenzaron a dar esos primeros pasos en el tema de salud laboral fueron los trabajadores químicos, (STIQ), construcción (SUNCA), metalúrgicos (UNTMRA), refinería de petróleo (FANCAP), suministro de agua y saneamiento (FFOSE), generación y distribución eléctrica (AUTE), elaboración y embotellado de bebidas (FOEB) y la fábrica nacional de neumáticos (FUNSA).
Es interesante resaltar que estos colectivos pertenecen a ramas de la actividad laboral en los que los riesgos en el trabajo son bien visibles y algo muy importante, tienen una larga tradición de organización y lucha sindical.
El colectivo inicia sus actividades en 1984, y se consolida en 1987, acompañando la reorganización del movimiento sindical nacional, reafirmada por la creación de nuestro Instituto de Investigación y Formación..
Es de señalar, que ese Plenario Intersindical de Trabajadores, instancia permitida por la dictadura, una vez que ésta fuera derrotada volvió a su fuente la CNT y se lanzó la consigna, “PIT y CNT dos nombres, un solo movimiento sindical“. Esta continuidad se reflejó al volver a utilizar los estatutos de la CNT como base del funcionamiento, por lo cual no hubo dos “centrales”, una es la continuidad de la otra, de ahí a. nuestro actual nombre “PIT-CNT”.
De Subcomisión a Secretaría
Los primeros pasos de nuestro colectivo, en la medida que no existía en los estatutos de la Convención un área de Salud y Seguridad en el Trabajo, estuvo marcada por la pertenencia a la Comisión de Seguridad Social como Subcomisión de Seguridad e Higiene del Trabajo.
El nombre refleja la formación, en primer lugar, de algunos de los participantes, egresados de la escuela oficial de artes y oficios de la Universidad del Trabajo (UTU), única instancia donde se impartían cursos específicos de Seguridad e Higiene en el Trabajo; y a su vez, la formación que impartía el Banco de Seguro del Estado (instituto que detenta el monopolio de la cobertura de los riesgos del trabajo) cuyos cursos tenían también aquella denominación.
Debemos mencionar a quienes participaron en esos primeros pasos. Gene Mateos, Julio López y Miguel Castiglia de FANCAP, Jorge Álamo de FFOSE, los compañeros que ya no están entre nosotros, Miguel Guzmán y Ronald Grasside del SUNCA, José Terán de la FOEB, el “vasco” Luis Erramuspe de AUTE y quienes aún continúan en el colectivo; Jorge Ramada de STIQ, y quien escribe, en esa época metalúrgico de la UNTMRA.
En los inicios, en reuniones de formación sobre el tema, intentábamos definir una estrategia para posicionarnos como movimiento sindical en la defensa de la salud de nuestros compañeros, y para ello fue crucial nuestra formación política y visión de clase para poder encararlo. En esos primeros pasos hacíamos formación reproduciendo con nuestras palabras la visión tecnocrática que nos habían enseñado, eso ni nos alcanzaba ni nos conformaba, queríamos más.
El aporte de algunos compañeros que volvían del exilio nos permitió conocer algunas experiencias europeas, fundamentalmente el Modelo Obrero Italiano y su versión de Comisiones Obreras (CC.OO.) de España. Sin duda era lo que buscábamos y queríamos. Lo adoptamos y lo aplicamos, y en la actualidad sigue siendo uno de los ejes de nuestra actividad formativa, la denominada “Metodología Sindical de Análisis de las Condiciones de Trabajo”. Con el tiempo, logramos que Ángel Carcoba de CC.OO., quien difundiera y adaptara en España el Modelo Obrero Italiano, así como Fulvio Perini de la Confederación General Italiana del Trabajo (CGIL), directo participante en la creación del modelo, vinieran a impartir cursos de formación a nuestro país.
Los años pasaron y aquella subcomisión se convirtió en comisión, luego en departamento y hoy es la Secretaria de Salud Laboral y Medio Ambiente reflejando nuestra evolución como colectivo y la importancia que la organización le dio. Guía para la acción Sindical” (1993). W. Miglionico Caino
A modo de balance
Reivindicamos una forma de hacer las cosas que rescata la experiencia obrera, valora el trabajo colectivo, los acuerdos sobre aquellas cosas que nos lastiman, en cómo actuar colectivamente, en no delegar la defensa de nuestra salud, en asumir nosotros esa defensa. En aplicar aquello que afirmaba Galileo: “no hay ciencia posible sin experiencia”, que es lo que nosotros tenemos, la hemos pagado con nuestra salud y muchas veces, demasiadas, con nuestra vida.
Hoy día en un mundo copado por los expertos, los saberes profanos tienen poca o ninguna legitimidad, por nuestra parte reivindicamos una forma de hacer las cosas plenamente vigente. No debemos dejar de lado que también contamos con una herramienta que tenemos en el país desde 1943, la negociación colectiva, una forma comprobada de avanzar en mejorar las Condiciones y Medio Ambiente de Trabajo (CyMAT).
En nuestro continuo avance, aproximadamente en 1998 incorporamos la problemática ambiental como uno de nuestros cometidos, no es posible condiciones de trabajo saludables sin una preocupación por todo el medioambiente.
Nuestra área de trabajo ha tenido muchos logros, difícilmente otra organización sindical latinoamericana pueda ostentar mayor continuidad que nosotros, no solo en años de trabajo ininterrumpidos, sino en logros concretos.
Ello puede observarse desde la participación en la elaboración de todas las normas en materia de Salud y Seguridad en el Trabajo (SST) promulgadas en el país desde hace dos décadas con escasas excepciones, y con una permanencia ininterrumpida en los 28 años de vida de nuestro Consejo Nacional de Salud y Seguridad en el Trabajo (CONASSAT), hasta sostener con mucho orgullo que todos los becarios que la PIT-CNT envió al Centro Internacional de Formación de la OIT en Turín para formarse en seguridad y salud en el trabajo , aún continúen en actividad en el colectivo, salvo por fallecimiento o jubilación.
Hemos realizado un un racconto histórico, pero no podemos terminar sin mencionar lo que nos dijo hace tres décadas nuestro maestro Jose “Pepe” D`Elia presidente honorario del PIT-CNT al escuchar nuestras quejas sobre la escasa comprensión por parte del resto del colectivo sobre nuestros planteos; ”ni autocomplacientes, ni autoflagelantes, sigan trabajando, ustedes tienen razón, ya comprenderán”. Siempre nos apoyó, no podíamos dejar de nombrarlo.
“Se hace imprescindible una transformación radical del marco en que se desarrolla la actividad laboral, como única forma de asegurar condiciones de trabajo saludables. Es imposible realizar prevención en serio de los accidentes y enfermedades contraídas a consecuencia o en ocasión del trabajo, sin tener presente que estas manifestaciones sobre nuestro estado de salud no son ni castigo divino, ni obra de la falta de fortuna, son consecuencia de las definiciones que se toman a la hora de establecer cómo se realiza el proceso de trabajo”. IX Congreso PIT-CNT (2006).
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